Desde la Tribuna | Redonda ¿¿Tarde??

Por Murdok Heras.

@MurdokHeras

Como cada partido que resta en fase regular, el de este sábado resultaba de vital importancia para las aspiraciones del equipo por acceder a la lguilla.

Así como fue la serie de Copa ante Celaya, de nuevo se topaba con un rival a modo, con muchos problemas futbolísticos y que daban muestra de que, cuando las cosas van mal, siempre va a haber alguien en peores condiciones que las tuyas.

También es cierto que "mal de muchos, consuelo de tontos"; era necesario salir al campo de juego a partírsela y sacar el resultado sin importar quién estaba enfrente.

Cuando vi la alineación inicial, me extrañaron muchas cosas: ver al 'Perrito' Sánchez como titular, que Gorocito no estaba ni en la banca. Además que, pese a que Luis Perez fue pieza clave del equipo que jugó la Copa, no hubiera iniciado el encuentro.

Lo que no extrañó fue el recibimiento que le dio el respetable a Armando Navarrete. "¡Por tu culpa no ascendimos!" fue lo más ligero que le gritaron, pues.

Esta tarde todo le salió a Fuentes, el equipo empezó a jugar al toque y muy pronto se sintió peligro en el marco fresero. Y cuando las cosas parecían emparejarse, con llegadas constantes de Irapuato en el área de los Rayos, el pressing que los locales ejercían, hicieron que Gallegos tomara un balón en tres cuartos de cancha, generara el espacio y metiera un soberbio pase al hueco, para que el Shaggy entrara franco al área y decretara el primero de la tarde al minuto 34.

Llegaba así un poco más de tranquilidad al equipo, pero diez minutos más tarde el Perrito recibió un balón unos pasos fuera del área y sin dudarlo mucho, mandó tremendo disparo directo a las redes. Lo mejor fue el festejo, felicidades a la familia Sánchez.

Total que al medio tiempo todo era paz y armonía, con un Necaxa dueño del partido y que por momentos generaba buen espectáculo. La pregunta necesaria, ¿por qué hasta ahora, por qué no podía ser así desde el principio del torneo y por qué no era así también en cancha ajena?

Para el segundo tiempo la afición estaba prendida. El equipo no tanto, se dejó llegar mucho, cedió el control a los guanajuatenses y se empezaban a complicar las cosas. Ya el profe Roberto Sandoval había hecho cambios a la ofensiva, pues para la visita también era trascendental el encuentro y su cuadro se empezaba a envalentonar. Lo clásico, el 2-0 es el marcador más engañoso.

En buen momento llegó el cambio, se dio el ingreso de Tatá por el 'Sheila' Orozco y las cosas cambiaron, pues le bastaron cuatro minutos para recibir, controlar y driblar dentro del área rival, para anidar el esférico y levantar el grito de los 3,565 aficionados que se dieron cita. Bueno, en realidad un poco menos porque en esta ocasión sí hubo porra visitante con la presencia discreta de los hijos de la mermelada para apoyar a su Trinca.

Al medio tiempo ya había salido Everaldo y dejó su lugar al mencionado Lucho Perez. El útimo cambio fue el ingreso de Isijara por el chileno Gallegos, que dio otra gran actuación. De modo que Fuentes terminó el encuentro con un tridente al frente, dejando a Lojero en punta, con Tatá y el ratón en los alerones, dejando a Alaffita y al Shaggy más retrasados para tapar las salidas por las bandas que Irapuato buscaba.

Repito, todo le salió al equipo, pues aunque los freseros tuvieron varias claras frente al marco de Gallardo, poca fortuna tuvieron entre cruces defensivos y errores groseros al ataque.

En conclusión, era importante sacar la victoria y se hizo; pero de poco va a servir si no se logra mantener continuidad en el funcionamiento. Esperemos que por fin se logre repetir una alineación para el partido en Mérida, ya sin Copa de por medio y se aproveche ahora sí la oportunidad de sacar los tres puntos en cancha ajena; pero sobretodo, se logre mantener un buen funcionamiento al frente y se preserve la tendencia hacia el final de esta fase regular.

De manera que, cuando empiece el nuevo torneo que es la Liguilla, la inercia de una buena racha permita cambiar el panorama que, hasta ahora, indica que difícilmente se llegue al título en este primer torneo de la nueva era necaxista.

Veremos qué pasa en la blanca Mérida y ya estaré ansioso de reportar los sucesos de un nuevo duelo entre rayos del Necaxa y potros prietos del Atlante, que como estén y donde estén, siempre será un duelo especial para nosotros, los románticos del necaxismo.

¡¡Hasta entonces!!